04, Febrero 2021.
San Pedro Sula, Honduras.- El gremio médico nuevamente se encuentra de luto al trascender la noticia sobre el fallecimiento del reconocido doctor Cándido Ulises Mejía Padilla.
El destacable médico, se ganó el corazón del pueblo hondureño por su bondad, puesto que ayudó a cientos de personas a recuperarse del mortal Covid-19.
Cándido, era dermatólogo e internista y jefe de dermatología en el Hospital Mario Catarino Rivas de San Pedro Sula.
El doctor, mantenía su firme filosofía de concientización contra el nuevo virus.
También te podría interesar: Aumenta en un 20% el número de muertes por Covid-19
“la mejor vacuna es quedarse en casa”, argumentaba cándido en diferentes entrevistas.
Del mismo modo, exhortaba a la población a evitar las aglomeraciones, hacer uso de la mascarilla, lavado de manos y otras precauciones.
Entre tanto, el “médico del pueblo”, como le llamaban; se mantuvo interno y estable en el Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS), en SPS.
Luego de complicaciones en su salud, fue ingresado a la Unidad de Cuidado Intensivos donde lamentablemente perdió la vida.
El gremio médico lamentó profundamente su partida y algunos de sus compañeros hicieron publicas sus muestras de pesar:
“otro héroe de primera línea nos deja, el dr. cándido mejía, nuestro más sentido pésame a su familia y gremio médico”, escribió a través de su cuenta de twitter el presidente de la asociación de médicos del ihss, dr. carlos umaña.
Su profesión y gran don por ayudar, fue herencia de su padre Cándido Mejía Castro, quien se desarrolló como médico cirujano de toráx.
A su vez, su experiencia de casi 30 años, lo colocaba sin duda alguna como uno de los mejores en su campo.
El galeno, fue padre de gemelos, fruto de su matrimonio con su ahora viuda, Luisa Villafranca.
Con la muerte de Cándido ya suman 73 médicos que han perdido la vida por el mortal Coronavirus.